Ya se está acercando una de las más entrañables épocas del año. La Navidad es tiempo de unión, de festejos, de reencuentros con toda aquella gente que más se quiere. Tiempo de alegría y serenidad.

Como no podía ser de otra manera, toda empresa que se precie lleva a cabo una celebración de la Navidad en el trabajo con el fin de afianzar el espíritu de equipo de todos los miembros que la conforman.

Como bien es sabido, a lo largo de la historia las actividades elegidas para estos eventos han ido incrementándose en cuanto a variedad y originalidad.

Antiguamente se basaba en un encuentro gastronómico y todo terminaba tras esa amena pero, al fin y al cabo, típica cena o comida de empresa en la que, con suerte, se había propuesto la recurrente actividad del “amigo invisible”, repartiendo papelitos con los nombres de los participantes por toda la oficina para hacerse regalos unos a otros de manera anónima, sembrando así un pequeño halo de misterio y diversión entre todos los compañeros. Esa emoción es toda a la que podíamos aspirar en una cena o comida de navidad con nuestra empresa. En cambio ahora, curiosamente, aquí es donde empieza todo.

Las empresas más modernas y transgresoras han empezado a iniciarse en dinámicas actividades como las gymkanas, que contienen todo tipo de pruebas de agilidad, destreza, memoria y mímica. Retos constantes, contemplando siempre la presencia del trabajo en equipo dentro del propio juego.

Las actividades con animaciones externas contratadas de diversas temáticas entre sí, también han pasado a ocupar un primer plano en numerosas empresas europeas, así como los concursos de baile. Son costumbres y tradiciones que se van adoptando y extendiendo de unos a otros hasta convertirse en una verdadera tradición en muchas empresas.

En el año 2006 se gestó el concepto Escape Room en USA, juego de ordenador de tiempo limitado para resolver un enigma, y en 2008 aparecieron por primera vez los juegos de escape en vivo, en salas reales. Desde ese momento hemos visto como las actividades de Escape Room para empresas han cobrado un protagonismo notorio.

Este suma y sigue de diversidad en cuanto a actividades de equipo, ha conseguido hacer de las celebraciones de navidad en las empresas algo verdaderamente enriquecedor para el propio fomento del compañerismo entre sus miembros, además de haberse convertido en una fecha con actividades muy ansiadas por todos.

Disfrutan haciendo tándem, jugando en equipo. Pedagógicamente no se le puede pedir más a una empresa. Es considerado todo un éxito conseguir infundir estos valores mediante un ambiente jovial y lúdico.

Y cuando ya parecía que no podían sumarse más sugerencias estrambóticas para grupos de trabajo que mezclan a jefes y compañeros con ganas de compartir experiencias y pasarlo bien, aparecemos nosotros, Local Tuk Tuk, con una flota de tuk tuks 100% eléctricos y una soberbia capacidad logística para prepararles uno de los mejores tours alrededor de la ciudad junto a todo su equipo.

Llamar la atención por la calle de camino al restaurante siendo transportado en un vehículo tan peculiar, y sacar las fotos de empresa más divertidas nunca antes vistas dentro de un tuk tuk, ahora también está a su alcance.

Si considera suculenta esta actividad para su fiesta de empresa, escucharemos sus sugerencias y haremos todo lo que esté en nuestra mano para que se lleven con ustedes una experiencia única.

Ser pionero en inaugurar estas fiestas subido en un tuk tuk eléctrico junto a todos sus compañeros de trabajo es una anécdota, desde luego, divertida, a la par que original y ostentosa. ¡Llame la atención con nosotros! ¡Festeje la Navidad en el trabajo con Local Tuk Tuk!